En el décimo aniversario de la Vista Country Club, Marcos Salame Jafif dice: “México no necesita de los mercaderes del caos”.
El empresario inmobiliario Marcos Salame clona a Carlos Slim. Pide desalentar discursos catastrofistas de los medios de comunicación y de los políticos sobre la recesión económica en el fraccionamiento de Puebla impulsado durante la administración de Manuel Bartlett Díaz.
El festejo
Para los VIPS de Puebla el festejo inició con la Big Jazz Band. Ana Victoria, la hija de Amanda Miguel y Diego Verdaguer apenas sí pudo prender a los comensales inmersos en el chismerío de la sobremesa. Ana Victoria le dedicó a Marcos Salame sus canciones, el empresario ni se percató ocupando repartiendo abrazos entre sus invitados.
La lista de cantantes fue un remake de Siempre en Domingo, como si fuera un homenaje al bartlismo musical en la historia de la especulación inmobiliaria.
Luego del debut de la cantante en Puebla, tocó el turno para Aída Cuevas –su look a la Lola Beltrán fue contundente - pero poco afortunado para encender el agasajo.
Una serie de videos de picaresca alusivos a la Vista sirvieron como cortinilla entre cantante y cantante burlándose del físico Albert Einstein y haciendo close-up en los pechos de una chava, recordándose quizás inmerecidamente el cine de ficheras. La imaginación del avezado guionista condujo el video a los pechos de la chava diciendo que era “la Vista” en un realmente novedoso juego visual.
Algunos sesentones y setentones entonaron las canciones de Agustín Lara, mientras en las mesas repartieron churrumais.
Gualberto Castro y Ana Cirré tampoco prendieron a las chicas y chicos “Rostro” de la fiesta. Para esa hora ya todo mundo posaba a la menor provocación y en los baños las mujeres hacían cola.
Amanda Miguel y Diego Verdaguer aprovecharon, a unos cuantos metros de los baños, para codearse con sus fans:
-¿Quieren una foto?
La pareja posaba lo mismo con la gente más inn que con los empleados de la Vista para la foto sin histrionismos. Se notaba que la pareja disfrutó la cercanía con la gente.
La baja exigencia del público –más que el Brandy la baja calidad de la burguesía local - permitió momentos memorables. Un video del cuarteto de Liverpool encendió a la concurrencia.
La maestra de ceremonias anunció a unos imitadores de los Beatles –traídos de las Vegas- cuyo mayor mérito era pronunciar frases en inglés con pronunciación de Harmon Hall. La fonomímica de los Beatles prendió a la poca exigente burguesía poblana que apechugó con rolas como “She loves you” y “Love me do” con los consabidos efectos dopamínicos.
El cuarteto de imitadores logró efectos miméticos sorprendentes. Un grupo de chavitas “Rostros” coreaban las rolas como si el mismísimo John Lennon hubiera resucitado de su tumba o ellas estuvieran en uno de los conciertos de los Beatles de la gira en 1965 en los Estados Unidos.
Pero el éxtasis llegó con Emmanuel.
Alrededor del escenario colocaron guaruras. Las mujeres, señoras y niñas rostros se abalanzaban. La gente se sabía las rolas de Emmanuel y las corearon a rabiar.
Salame se subió al escenario cantar con Emmanuel ya en el colmo de los caprichos personales y compitiendo con Emanuel por ser el centro de la fiesta.
En el festejo de la Vista Country Club en sus primero diez años la burguesía poblana el mercader inmobiliario condenó a los “mercaderes del caos”: los medios de comunicación y los políticos por hablar de la crisis. Sus lujosos invitados rememoraron la Belle Epoque bartlista. Unos abrazando y felicitando al exgobernador, Manuel Bartett, y otros, ya entrada la noche, coreando las canciones de los Beatles y Gualberto Castro. Sólo faltó Raúl Velasco de maestro de ceremonias, en este evento retro Pero ya con Emmanuel en el escenario, el deshinibido anfitrión Marcos Salame, se trepó a cantar con el cantante de lujo que cerró con broche de oro y entre tumultos de las jovencitas y las señoras popoff la pachanga, provocando que la burguesía se pusiera dionisiaca.
La Gran comilona celebrada en el corazón de la élite poblana -el fraccionamiento la Vista Country Club- convocó lo mismo a las socialités que a los políticos jurásicos se prolongó hasta entrada la noche. Entre sopa de alcachofa y los murmullos los comensales poco caso hicieron de la fílipica empresarial de Marcos Salame, orador principal de la comida.
Pero las confesiones vueltas quejas merodearon el imaginario de la burguesía. En el videoclip de la historia de la Vista los empresarios entrevistados se quejaron: “En Puebla hay un déficit de campos de golf”, explicando el origen del fraccionamiento.
El empresario Marcos Salame, gurú de la inmobiliaria la Vista Country Club, reprobó a los políticos y a los medios de comunicación por hablar de la crisis. Salame sermoneó y clamó por regresar a los valores de la familia, la religión y el trabajo para salvar la recesión económica.
Sólo los VIP pudieron ingresar a la Vista. La burguesía local de la Puebla Revolucionaria conmemoró al gurú empresarial Marcos Salame en el décimo aniversario de la Vista Country Club en una remembranza de la Belle Epoque Bartlista. Pero el esfuerzo de Salame por regresar a los viejos valores religiosos fue recibido por un auditorio apático ante su discurso pero le coreó su dueto con Emmanuel. La burguesía estatal entonó las rolas de los Beatles y se prendió con las ochenteras canciones de Emmanuel mientras comían churrumais, tomaban bebidas nacionales y compraban los últimos lotes de la Vista.
Mario Marín Torres -quien fuera el operador político de la Secretaría de Gobernación durante la compra de terrenos a ejidatarios para la Vista Country Club en el sexenio de Manuel Bartlett Díaz-disfrutó los merecidos elogios de su anfitrión Salame. El gobernador se resistió a abandonar la mega-fiesta. Abandonó la fiesta al terminar de cantar Emmanuel, después de las 11 de la noche.
Entre las socialités y los jurasic
Durante el 10 aniversario del Fraccionamiento La Vista Country Club –impulsado por el gobernador Manuel Bartlett Díaz, los empresarios Marcos Salame y Carlos Peralta- el mandamás inmobiliario, censuró a los medios de comunicación por crear una atmósfera de desaliento al abordar la recesión económica. “México no necesita de estos mercaderes del caos”, enfatizó el empresario inmobiliario ante unas 2 mil personas de la burguesía poblana.
Salame exhortó a regresar a los valores religiosos para contrarrestar los tiempos que vivimos: “Cuando los hombres acordaban los tratos de palabra. Y eso era suficiente. Cuando yo era niño, teníamos una sociedad basada en valores, religión y respeto. Esto se ha perdido los resultados son evidentes. ”
La comida para celebrar los 10 años de la Vista congregó a empresarios, gobernadores, exgobernadores, senadores, rectores, alcaldes, diputados, cantantes reciclados de la caja de pandora de “Siempre en Domingo” -como Aída Cuevas, Amanda Miguel y Diego Verdaguer- hasta las infaltables socialités locales que posaban a la menor provocación de una cámara fotográfica. También periodistas arrumbados por el canal de las estrellas como Ricardo Rocha.
El campo de golf de la Vista se volvió un helipuerto. El fraccionamiento una fortaleza ante la vigilancia excesiva de la policía estatal. Una alfombra rojo recibió a los invitados. Las mujeres con las bubis operadas –verdaderos cyborgs femeninos- y las ninfas de vestidos escotados y faldas entalladas y cortas opacaron a los políticos a la hora de los flashazos.
El gurú inmobiliario se desbordó en elogios para los exgobernadores Manuel Bartlett Díaz, Melquiades Morales Flores y para el actual gobernador Mario Marín Torres.
Primero los video-homenajeó y ya en el discurso reiteró las video-flores: “Sin su ayuda ni el estado de Puebla ni nosotros hubiéramos podido avanzar. Honor a quien honor merece”.
La comida se prolongó. En la sobremesa abundaron los encuentros políticos: Blanca Alcalá Ruiz conversando animadamente con su mentor, Manuel Bartlett Díaz.
Carlos Peralta platicando con el nacionalista jurásico Manuel Bartlett y el gobernador de Durango.
Ricardo Henaine, empresario del desvencijado Parque de diversiones “Parque fantástico”, clamándole al gobernador Marín. Enrique Agüera Ibáñez, Javier López Zavala y Jorge Estefan Chidiac haciendo una tercia para la foto, como reafirmando sus lazos de amistad.
Melquiades Morales Flores reencontrándose con sus excolaboradores.
Ya por la noche con un show músical la fiesta de la belle epoque bartlista continúo. El añejo Gualberto Castro desempolvó su nostálgico repertorio. Aida Cuevas y Carlos Cuevas sacaron del ronco pecho rolas de mariachi. Pero las “oldies” de Emanuel enloquecieron a la pequeña burguesía local que vivió en la fiesta de la Vista un sueño de cuento de hadas. Hasta un cuarteto de Liverpool clonado –el vocalista era igualito a Harrison- le dio su toque de fonomímica al magno evento. La fonomímica fue como un performance para burlarse de John Lennon.
Gracias, señor Gobernador, gracias
Durante la comida, el empresario de origen libanés, Marcos Salame, orador principal, criticó a la clase política del país por medrar con la crisis económica: “Cuando los políticos hablan más de economía que de prosperidad las naciones se contraen”
“Dejemos de promocionar la crisis –pidió-. Fuimos bendecidos con 12 mil kilómetros de costas, somos una nación privilegiada cuyo activo es su gente. Hay que trabajar intensamente para dejar atrás este momento que vive el país.”
El empresario inmobiliario agradeció el respaldo de los exgobernadores Manuel Bartlett Díaz, Melquiades Morales Flores y del actual gobernador Mario Marín Torres.
“Sin su ayuda ni el estado de Puebla ni nosotros hubiéramos podido avanzar. Honor a quien honor merece ”, dijo.
Para Mario Marín Torres, quien fuera funcionario de la administración Bartlett también hubo elogios: “Mención especial merece nuestro gobernador Mario Marín cuya presencia inyecta a Puebla ese espíritu de modernidad. La gran remodelación en el boulevard Atlixcayotl. Esa impresionante obra. La gestión de nuestro gobernador Mario Marín, es un modelo de continuidad. Gracias a él gozamos de una acción incansable. Puebla sigue hoy progresando gracias a Mario Marín.”
Salame anunció nuevos empresas inmobiliaria: Los edificios de departamentos La Vista Towers, en el fraccionamiento La Vista Country Club. Además, La Vista Veracruz y la Vista Riviera Maya.
Ante la poca atención de los comensales, el gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán sólo habló un minuto. Herrera Beltrán lanzó un desafío. Dijo que en su estado se culminará con mayor rapidez el proyecto inmobiliario, con capital español y de los empresarios inmobiliarios de la Vista Country Club de Puebla, “La Vista Veracruz”, ubicado en terrenos aledaños a la población histórica de la Antigua, Veracruz.
El empresario Alvaro Quiroga Gutiérrez (de grupo Gdico Empresarial) anunció para Veracruz una empresa inmobiliaria más grande que la Vista Country de Puebla.
“Los españoles no conquistaron México, sino que México conquistó el corazón de los españoles. A la Angelópolis sólo le falta el mar.”
La inmobiliaria construirá sobre 2,700 hectáreas, 4 campos de Golfo, una marina de 1,200 amarres, un parque empresarial.
Marín Torres también fue escueto ante el bullicio de los asistentes. Animó a los empresarios a seguir invirtiendo en Puebla.
A la comida de celebración del 10 aniversario del fraccionamiento La Vista Country Club asistieron los gobernadores Fidel Herrera Beltrán, de Veracruz; Ismael Hernández Deras, de Durango. Empresarios como Carlos Peralta, Ricardo Henaine y Roberto Galante, Enrique Montero Ponce. También los exgobernadores, Manuel Bartlett Díaz y Melquiades Morales Flores.
También el secretario de desarrollo social Javier López Zavala, la alcaldesa Blanca Alcalá Ruiz, el diputado federal Jorge Estefan Chidiac, el rector de la BUAP Enrique Agüera Ibáñez, el secretario de gobernación Mario Montero Serrano, el senador de la república, Rafael Moreno Valle Rosas.
Regresar a la vieja sociedad basada en valores religiosos
El discurso de Salame también pidió regresar a los valores del pasado: “Cuando los hombres acordaban los tratos de palabra. Y eso era suficiente. Cuando yo era niño, teníamos una sociedad basada en valores, religión y respeto. Esto se ha perdido los resultados son evidentes. ”
Achacó a la nueva composición social la crisis económica.
El empresario señaló que la “crisis” es una oportunidad para salir adelante.
“No nos asusta el contexto mundial que vivimos, venceremos las dificultades, somos conscientes los riegos que tenemos.”
“Como dice mi compadre Carlos Peralta, los tiempos difíciles son tiempos de grande oportunidades. Las fuentes de empleo son responsabilidad de nosotros los empresarios, los mexicanos han sido hombres y mujeres de grandes retos.”
“Mi abuelo llegó a este país en 1890. En mi casa se nos inculcó un gran amor por México. Tiempo para trabajar por el país sin importar tendencias políticas ni de grupo. México merece el esfuerzo supremo de cada uno de nosotros.”
Salame agradeció al empresario Carlos Peralta su apoyo: “De un hombre más allá de cualquier especulación, gracias al amor y dedicación a la Patria, inculcada por un mexicano de tiempo completo, Don Alejo Peralta. Este hombre de quien estoy hablando es mi amigo Carlos Peralta.”
Para su amigo, Roberto Galante también palabras de agradecimiento:
“Hace 10 años me encontré una familia. Don Roberto Galante, su esposa y sus hijos.”
El menú:
Esparragos y camarones
Crema de alcachofa
Sorbete de pera e hierbabuena
Plato Fuerte
Filete de res Sofía
Postre
Petit four cheese de cake de guayaba
Bebidas:
Vodka
Tequila
Brandy
Whisky
Pobrecito empresarios
En un video para conmemorar el aniversario uno de los empresarios entrevistados se quejó:
“En Puebla hay un déficit de campos de golf”.
El gurú inmobiliario se desbordó en elogios para los exgobernadores Manuel Bartlett Díaz, Melquiades Morales Flores y para el actual gobernador Mario Marín Torres quienes respaldaron el desarrollo inmobiliario privado.
Primero los video-homenajeó y ya en el discurso reiteró las video-flores: “Sin su ayuda ni el estado de Puebla ni nosotros hubiéramos podido avanzar. Honor a quien honor merece”.
“Yo pertenezco a una generación de crisis. 1976, 1982, 1994 y ahora el 2009. Mi padre don León Salame. Las crisis pueden superarse solamente de trabajo. Dejemos hablar de crisis, sólo así saldremos más rápido de esta situación," dijo Marcos Salame
